Antes de ponerte manos a la obra tienes que detectar cuál es la causa exacta de la avería. Puede ser por un mal contacto o porque el interruptor se haya deteriorado con el paso del tiempo. De todas formas, antes de ponerte a manipular algo que tenga que ver con la electricidad, lo primero que debes hacer es cortar el suministro para evitar problemas.
Después tendrás que verificar dónde está el problema del interruptor. Para averiguarlo, quita de la pared el interruptor que no funciona, así podrás ver si se ha desconectado algún cable o no. Para quitar el interruptor de la pared afloja los tornillos y levanta la tapa. De esta forma podrás comprobar directamente el motivo de la avería.
Tipos de averías
Si se ha desconectado un cable, lo único que debes utilizar es un pelacables para cortar un poco el plástico que recubre los hilos de cobre. También deberás cortar la punta de los propios hilos para que hagan un buen contacto después. Acto seguido vuelve a colocar el cable en la zona donde estaba y coloca el interruptor de nuevo en la pared. Cuando ya lo tengas puesto, da a la corriente para ver si con esto se ha solucionado.
Si sigue sin funcionar, entonces será por simple deterioro del interruptor. En este caso tendrás que sustituirlo por uno nuevo. Para ello acude a una ferretería o centro de bricolaje y compra uno de similares características. Puedes llevarte el viejo para comprobarlo mejor.
El paso siguiente será colocar los cables en el nuevo interruptor, cada uno donde corresponda, y sujetarlo a la pared con los tornillos.
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